Presunto asesino de George Floyd en EE.UU. rechaza testificar

Washington, 15 abr (Prensa Latina) El exoficial de policía Derek Chauvin confirmó hoy que se acogerá a la Quinta Enmienda de la Constitución estadounidense para abstenerse de testificar en el juicio donde lo acusan del asesinato de George Floyd.


«Invocaré mi privilegio de la Quinta Enmienda hoy», dijo Chauvin durante una conversación con el abogado defensor Eric Nelson, y puso fin así a las especulaciones sobre si subiría o no al estrado.


El exagente argumentó que no quiere arriesgarse a hacer declaraciones autoinculpatorias en el Tribunal de Distrito del Condado de Hennepin, donde lo acusan de matar a George Floyd a fines de la primavera pasada en Minneapolis.


La declaración se produjo al responder una serie de preguntas de su abogado, Eric Nelson, sin la presencia del jurado, y cuando se espera que este jueves sea el último día en que la defensa presente sus argumentos sobre el caso.

Según el diario local Star Tribune, Nelson y Chauvin estaban sentados en la mesa de los letrados  cuando se escuchó la voz del acusado por primera vez durante el juicio.


La defensa le dijo al juez de distrito del condado de Hennepin, Peter Cahill, que no llamaría a más testigos después de dos días de testimonios.


Cahill expresó su intención de que tras un breve descanso,  los abogados presenten sus argumentos finales tan pronto como el lunes antes de que los miembros del jurado deliberen si Chauvin debe ser condenado por usar fuerza excesiva en el asesinato de Floyd.

El miércoles, habló en la sala un patólogo retirado quien aseveró que Floyd, de 46 años, murió de un paro cardíaco combinado con el uso de drogas, y no por falta de oxígeno, a pesar de que la Oficina del Médico Forense del Condado de Hennepin dictaminó el año pasado que la forma de muerte fue homicidio.


El abogado de Chauvin, Eric Nelson, reiteró que Floyd probablemente murió el 25 de mayo de una sobredosis de drogas y problemas de salud preexistentes.


Sin embargo, los fiscales aseguran que Chauvin privó a Floyd de oxígeno cuando se arrodilló sobre su cuello durante más de nueve minutos mientras el afroamericano yacía esposado boca abajo en la calle con otro oficial arrodillado sobre sus nalgas y muslos y otro agente le inmovilizaba sus piernas.


En las primeras sesiones del juicio a principios de abril, se exhibió ante el jurado el video que se hizo viral en 2020, con las imágenes de Chauvin arrodillado sobre el cuello de Floyd mientras este reiteraba la frase: «No puedo respirar».


La grabación conmocionó al país y al mundo el verano pasado, y provocó protestas contra el racismo sistémico y la brutalidad policial, en particular contra los negros.


Chauvin enfrenta tres cargos criminales por homicidio en diferentes grados, y si lo declaran culpable, podría recibir hasta 40 años de prisión en un proceso que desde sus inicios exhibe un alto perfil y es televisado en vivo, lo que no tiene antecedentes en el estado.

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